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“Nunca pudimos ganar la batalla contra este enemigo invisible, ni con las más extremas cuarentenas, ni con las esperanzadoras vacunas, ni los tratamientos más sofisticados. Sólo hemos podido resguardarnos de él para siempre, cambiando diametralmente nuestra forma de vida tal como la conocimos”. Bernard Olsen (científico, humanista y fundador de FREECOV) Luego del primer brote de COVID-19, el mundo se vio afectado a su contagio de manera exponencial, erigiéndose como una terrible pandemia sin antecedentes en la historia de la humanidad, diezmando a su población y mutando en 27 formas cada vez más letales. Fue así como nacieron las llamadas ciudades FREECOV, gigantescas “Arcas de Noe” donde, tras los contados sobrevivientes, nacieron los primeros humanos nativos, desarrollando una existencia acotada, disciplinada y controlada, pero con la vida asegurada. Entre ellos, te encuentras tu, quien junto a un grupo de amigos freecovianos, has crecido en el Sector 33 del Arca 12. Claro que, del mundo que conocimos, solo un leve friso se ha conservado: las llamadas ISLAS VÍRGENES, un fabuloso y único lugar que se ha mantenido libre del virus, y que, sorteo mensual por medio, elige a 4 ganadores para ir a residir allí para siempre. Así, tu existencia transcurre con la esperanza de convertirte en uno de los afortunados ganadores. Pero un suceso extraordinario quiebra tu habitual mundo ordinario: luego de un extraño sueño, te despiertas a la madrugada, sobresaltado, por una voz que te ha anunciado claramente: “nada es lo que parece, sal de allí”. Todo podría tratarse de tu psiquis, claro, si no fuera porque tus otros amigos han tenido idénticamente el mismo sueño.